La Policía Nacional de España regulará el uso por parte de los agentes de la defensa y la porra. El protocolo policial detalla que en caso de golpear a una persona “bajo ningún concepto” se debe hacer en “la cabeza, cuello, clavícula o columna vertebral”. También se prohíbe el uso de la porra en la técnica de estrangulación.
Las nuevas porras llegarán antes de que se acabe el año. Según el protocolo, la nueva defensa se utiliza para detener las personas que muestren “una resistencia activa que ponga en riesgo la integridad física de los agentes o terceras personas”.
La Policía también fijó en qué situaciones se debe usar la pistola eléctrica tras la reciente adquisición de pistolas eléctricas. Según el protocolo, después de utilizar la pistola eléctrica se debe informar a la autoridad judicial.
La Policía española fija que su uso solo está indicado cuando se trata de “reducir, inmovilizar o detener” a personas que muestran una resistencia activa. También se usa para detener a las personas que tienen una actitud violenta o que amenazan con armas u objetos peligrosos a los agentes o a otras personas.