Cinco razones por las cuales es mejor estar sola

Nosotras, las mujeres, somos el sexo complicado de la sociedad de todos los tiempos. Y si piensas que no se puede vivir sola, sin los hombres, te equivocas.

A lo largo de los años, mujeres como la Reina Isabel I, también conocida como la “Reina de la Virgen”, ha tenido un gran éxito en un mundo de hombres: por su cuenta, literalmente y figurativo. Ahora, no te vamos a decir que vivas una vida sola, que todavía hay hombres buenos, pero te mostramos que también puedes hacerlo sin ellos. 

Hoy, las cosas no son tan… drásticas, pero aún podemos vivir muy bien en la ausencia de los hombres. ¡Ah, y como! Solo piensa un poco… primero, ya no te tienes que esconder en el baño para ponerte esa máscara de cuco en la cara. No te vas a pelear de nuevo con él porque no respondió a tu mensaje, a pesar de que lo hayas enviado hace 5 segundos. No te preocuparás más porque la suegra volverá a visitarte y se pondrá como loca.

¿Qué más podrías desear?

¡Puedes dormir bien por las noches otra vez, sin tener que dejar un rincón de la cama para él, sin que nadie te moleste. Eres oficialmente una mujer libre. Y si aún no sabes qué te pueda convencer que elijas esta vida, tenemos aquí cinco razones por las cuales es mejor vivir sola.

Más tiempo para ti

Si pensabas que el tiempo era suficiente cuando estabas con él, te equivocaste. Ahora puedes ir a peluquería cuantas veces quieras. Puedes escaparte con tu amigas un fin de semana fuera de la ciudad, porque estás sola. O simplemente puedes leer un libro nuevo cada día.

Tienes tiempo para ponerte  a ti en el primer lugar, Para ser libre, para ser feliz.

Puedes dejar tu teléfono en un rincón tranquilo de la casa y vestirte con ese pijama esponjoso. Puedes pedir una pizza y no tienes que comer como una diva o puedes simplemente olvidar de la existencia de un novio que pueda llegar a ser demasiado irritante.

No hay que dar ninguna explicación

¿No te cansaste de dar una explicación cada vez que sales en algun lugar, que te pregunten, como si tuvieras 3 años, ¿a dónde vas y cuándo regresas? Deshágate del estrés y sal cuando quieras, donde quieras y con quien quieras, sin nervios, porque te podría llamar de media a media hora, ¡cuando le dijiste claro a que hora estabas de vuelta!

No es necesario que alguien te respire siempre en la espalda, porque no eres el títere de nadie. Tal vez has tenido un mal día y todo lo que quieres es estar un poco tranquila, para poder calmarte, porque eres mujer, y con nosotros es más difícil con la paciencia. Necesitamos tiempo a solas. También vivir sola te deshace de todas las formas de explicaciones inútiles o de las peleas por cosas sin sentido, como por ejemplo cuando él roba el mando distancia para mirar el partido de fútbol con el volumen al máximo. 

Los regalos demasiado caros ya no serán un problema

Seamos serias, cuando estamos en una relación siempre queremos hacer el regalo perfecto, algo que no haya recibido hasta entonces y claramente no recibirá. Y para esto necesitamos de mucho dinero. Ahora, puedes invertir ese dinero en ti misma, en ese suave perfume que has estado persiguiendo durante meses. Incluso puedes comprar los pendientes que estaban completamente excluidos de la ecuación cuando tenías otros regalos que hacer. Ahora todo puede ser tuyo. 

Las noches con tus amigas no son tan divertida cuando un hombre decide asistir

¡Oh, estos hombres, ni siquiera nos dejan una tarde libre! Siempre quieren ser en el centro de la atención, rodeados de todas tus amigas. Solas podemos aprovechar al máximo una salida emocionante, junto con nuestras mejores amigas. También podemos volver a casa en cuando quieramos, porque nadie nos preguntará a dónde fuimos.

Mejor sola que infeliz

Muchas de nosotras nos complicamos la vida con relaciones que, para ser honestas, no tienen sentido. ¿Porqué encerarnos solas en la habitación para llorar? No sería mejor huir y abrir las alas?

Cuando estás sola, aprendes a respetarte a ti misma. Aprendes que eres hermosa y que realmente mereces ser feliz. 

Autoras: Gabriela Luigia

               Laura-Ștefania Bîrgăoanu

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